Una mota de polvo da vueltas sobre un disco de vinilo hasta que es alcanzada por la aguja. Entonces deja de escucharse esa música, que se convierte en un zumbido que atrae a insectos de todo tipo con ganas de bailar. Encima del tocadiscos se crea una nube de bichitos que baila y vuela formando sombras de colores que cambian con la luz. Hasta que una mosca pone huevos que caen sobre el vinilo y el zumbido se interrumpe y se disuelve el festín.
30 Enero 2003
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